Mientras se comienza a contemplar la posibilidad del regreso del público visitante en la Primera División del fútbol argentino, continúa latente el recuerdo de la tragedia ocurrida en el Estadio Único de La Plata el 10 de junio de 2013, que terminó con la vida de un simpatizante de Lanús durante un enfrentamiento con Estudiantes.
El partido entre el Pincha y el Granate, correspondiente al Torneo Final, fue interrumpido tras concluir la primera mitad, luego de confirmarse la muerte de Javier “El Zurdo” Jerez, de 45 años, a raíz de incidentes entre la barra brava de Lanús y la Policía Bonaerense. Tras el hecho, fueron apartados de sus funciones tres agentes: Roberto Lezcano, Víctor Bacuco y Jorge López. Posteriormente, el proceso judicial se centró en Lezcano, quien llegó en libertad al juicio y fue absuelto en 2016.
A raíz de este acontecimiento, se resolvió interrumpir la asistencia de hinchas visitantes, aunque inicialmente se proyectaba como una medida temporal que se revertiría al comenzar el torneo del segundo semestre de aquel año. Sin embargo, la muerte de dos aficionados de Boca el 21 de julio de 2013, en los alrededores del Estadio Pedro Bidegain tras un enfrentamiento entre grupos internos de la hinchada, llevó a que se prorrogara la restricción.
Un conflicto que venía en aumento
La prohibición para los visitantes ya regía en el fútbol de ascenso desde 2007, luego de que barras de Nueva Chicago asesinaran a Marcelo Cejas, simpatizante de Tigre. Además, existía un antecedente relevante en la máxima categoría: el Superclásico por las semifinales de la Copa Libertadores 2004, disputado sin presencia de hinchas de Boca en el Estadio Monumental.
Sin duda, lo sucedido hace doce años en La Plata estableció un precedente que todavía influye en la actual limitación del acceso de público visitante a los estadios en Argentina, con la única excepción de la Copa Argentina, que históricamente permitió la concurrencia de ambas parcialidades.
¿El regreso del público visitante al fútbol nacional?
En diciembre de 2017, el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia, anunció que los visitantes volverían a las canchas tras el Mundial de Rusia 2018. Sin embargo, esa iniciativa rápidamente perdió impulso, aunque en el último tiempo ha resurgido con fuerza.
Después de años de espera, una nueva experiencia piloto en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) renovó el optimismo por la posibilidad de contar nuevamente con ambas hinchadas en los estadios del país. El pasado miércoles 28 de junio, Excursionistas y Argentinos Juniors se enfrentaron por los 16avos de final de la Copa Argentina en el estadio de San Lorenzo, y las dos parcialidades pudieron asistir sin que se registraran incidentes de consideración.
“Quiero agradecer al jefe de Gobierno, Jorge Macri, y a todos los que hicieron posible este esfuerzo para que Buenos Aires vuelva a ser también la capital de la Copa Argentina”, destacó Tapia en la previa del encuentro. Sus declaraciones reabren la expectativa de que el público visitante pueda retornar, sin importar el lugar en el que se disputen los partidos del fútbol argentino.