Un informe del Cuerpo Médico Forense confirmó que en 12 de los 20 casos analizados existía un “nexo concausal” entre el medicamento adulterado y los fallecimientos. Ocho de ellos se registraban en la capital bonaerense.
El primer peritaje elevado por el Cuerpo Médico Forense a la Justicia Federal revelaba que el uso de fentanilo contaminado había tenido un rol determinante en varias de las muertes investigadas en distintos puntos del país. De los 20 casos evaluados, en 12 se comprobaba un “nexo concausal” entre la infección bacteriana y el fallecimiento, y ocho correspondían a pacientes internados en el Hospital Italiano de La Plata.
El documento, de 28 páginas, detallaba que las bacterias presentes en las ampollas —identificadas como Ralstonia mannitolilytica y Klebsiella pneumoniae— agravaban cuadros clínicos preexistentes, contribuyendo al desenlace fatal. Aunque los pacientes presentaban comorbilidades, los peritos señalaban que la evolución de sus enfermedades se veía “severamente afectada” por el medicamento adulterado. Entre las víctimas confirmadas figuraban Néstor Gabriel Carri, Luis Eduardo Zabala, Celia Noemí Hernández, Luis Miguel Martínez, Héctor Alfredo Padín, Ludmila Angélica Paz, Stella Maris Saddemi y Renato Nicolini.

La investigación judicial, a cargo del juez Ernesto Kreplak, se nutría además de los estudios del Instituto Malbrán, que ya había comprobado la contaminación bacteriana en los lotes distribuidos por HLB Pharma. La combinación de ambas pericias permitía avanzar sobre la cadena de responsabilidades, que alcanzaba tanto a los laboratorios productores como a los organismos de control, en particular la ANMAT. En todo el país, se analizaban alrededor de 150 muertes posiblemente vinculadas a este medicamento.



