La CONADU resolvió que, si el presidente Javier Milei veta la norma aprobada por el Congreso, se realizará un nuevo paro nacional con movilización frente al Palacio Pizzurno.
El plenario de secretarios generales de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU) definió por unanimidad que, en caso de concretarse el veto a la Ley de Financiamiento Universitario, se convocará a un paro y una movilización nacional al día siguiente. La protesta se llevará adelante frente a la sede de la Secretaría de Educación de la Nación, con la adhesión de todos los sindicatos del sector.
En paralelo, la federación resolvió impulsar una Marcha Federal Universitaria que coincidirá con la sesión parlamentaria en la que eventualmente deba debatirse el veto presidencial. Durante las semanas previas, se mantendrán acciones de visibilización en cada universidad y se desplegará una campaña de alcance nacional vinculada al proceso electoral, con el objetivo de convocar a la ciudadanía a respaldar a la universidad pública a través de su voto.
La CONADU difundió un comunicado en el que destacó el acompañamiento social al reclamo universitario y advirtió sobre la necesidad de consolidar y ampliar ese respaldo. El secretario general Carlos De Feo sostuvo que el conflicto ya adquirió un alto nivel de reconocimiento y subrayó que la próxima marcha federal deberá presionar para que el Congreso rechace de manera definitiva cualquier intento del Poder Ejecutivo de desconocer la voluntad legislativa.

En el mismo pronunciamiento, De Feo expresó que la movilización nacional tendrá como eje frenar una política de ajuste que, según señaló, busca afectar a la universidad pública. Remarcó que el desafío inmediato consiste en garantizar una participación masiva en las calles de todo el país el día que el Parlamento discuta el futuro de la Ley de Financiamiento.



